miércoles, 9 de noviembre de 2022

ORANDO CORRECTAMENTE A MI SEÑOR

 El 10 de diciembre del 2021 les escribí una gran historia de como mejoré notablemente mi salud al operarme mi columna porque me impedía caminar de forma normal.

     Fue una historia milagrosa, me operaron en Lima, Perú, en el Hospital Rebagliati de ESSALUD, un 06 de agosto del 2021.

    Esta historia la titule aquí en mi block “Dios concede los deseos de nuestro corazón”.

     Estaba feliz, me sentía bien y comencé a disfrutar de mi nueva vida, caminábamos con mi esposa cerca a nuestra casa todos los días por recomendación médica.

      No tuve rehabilitación física en el Hospital por la Pandemia.

    Ya a fin de año comencé a conducir mi auto; todo estaba bien y me sentía feliz hasta que de pronto comencé a sentir los mismos síntomas que sentía antes de operarse.

    Como era difícil por la Pandemia tener contacto con los doctores especialistas del Hospital Rebagliati opté por cometer un gran error : automedicarme para aliviar mis dolores.

    Ya los analgésicos y antiinflamatorios no eran suficientes y pasé a las inyecciones de analgésicos, cosa que trajeron malas consecuencias 

   Me sentía muy preocupado por mi salud, decepcionado y hasta triste de mi situación. Pensaba: y ahora que voy a hacer, tan difícil que es operarse en el Hospital Rebagliati (EsSalud), sobre todo conseguir cama.

   Había noches que calladamente lloraba desesperado porque no sabía qué hacer, realmente me sentía agobiado. Sabía que la Biblia dice en Mateo 11:28 “Vengan a mi los que estén cansados y agobiados, que yo los haré descansar” 

    Amigos el agobio es una sensación abrumadora de inquietud y ansiedad. Esto lo sentimos a nivel cognitivo (en el pensar) es rápido o está rumiando en nuestra mente, te bloquea con mucha intensidad emocional. 

   No sabía que hacer, desde ya agradezco a mi esposa porque siempre estuvo a mi lado animándome, ayudándome, consolándome y hasta sosteniéndome porque comencé a caerme al piso debido a la Estenosis Lumbar. Un día me caí en un Centro Comercial y me golpee muy fuerte la rodilla y esto complicó mi salud. 

     Ya estaba postrado en cama, caminaba a esfuerzos con bastón y tenía 61 años. Decidí preguntarle a Dios que hacer y me dio palabra “Otra vez os digo que, si dos de vosotros se ponen de acuerdo en la tierra acerca de cualquier cosa que pidan, les será hecho por mi Padre que está en los cielos” (Mateo 18:19)

-  “Porque mis pensamientos no son vuestros pensamientos, ni vuestros caminos mis caminos, dice Jehová. Como son más altos los cielos que la tierra, así son mis caminos más altos que vuestros caminos, y mis pensamientos más que vuestros pensamientos” (Isaías 55:8,9) también recordé que cuando uno está preocupado y hasta angustiado por algo que no le encontramos solución, debemos ser obedientes a lo que dice la Biblia, por algo somos cristianos Y el apóstol Pablo dice bien a los Filipenses “Por nada estéis afanosos, sino sean conocidas vuestras peticiones delante de Dios en toda oración y ruego, con acción y gracias. Y la paz de Dios que sobrepasa todo entendimiento, guardará nuestros corazones y vuestros pensamientos en Cristo Jesús (Filipenses 4:6,7) 

    Suelo escuchar casi todos los día música cristiana y un buen día escuché una nueva canción que me llamó mucho la atención porque me gustó su letra. 

     Se llama “Danzando” y es de Christine D¨Clario, Travy Joe, Daniel Calveti y otros.

     Anoté su letra que aquí se la leo, dice:

    “Tu palabra dice que, aunque pase por el fuego no me quemaré y si paso por las aguas no me ahogaré. 

      Aunque haya oscuridad con fe caminaré pues tú siempre vas conmigo. 

    Tu palabra dice, no hay justo que tú hayas desamparado, eres pan para el hambriento y necesitado. En mi mesa nunca, nunca ha faltado, tú provees y no has fallado. Yo no temeré, tu promesa es fiel.  Tu palabra dice que tú oyes el clamor del quebrantado. Por tu yaga en la cruz fuimos sanados.Sobre toda enfermedad tú has ganado y mi vida está en tu mano.

       Tu palabra dice que tu muerte en la cruz fue por salvarnos que perdones y redimas del pecado y en las nubes seremos arrebatados. Cara a cara te veremos. Yo no temeré, tu promesa es fiel




   Amigos, escuchar tanto esta canción, me fue dando fe de que Yo podía nuevamente ser sanado y caminar de forma normal. Quería caminar muy bien, porque suelo ir a predicar a un Centro Terapéutico de Rehabilitación en Bujama (al sur de Lima) semanalmente. 

   Siempre escuchaba esa canción y avivaba mi sentir por ser nuevamente curado, no sé cuántas veces la escuché, pero fueron muchas. Hasta que un buen día me escribió mi amiga y hermana en Cristo Mónica desde Montevideo.

    Me dijo que a su trabajo habían ido un grupo de personas de la Universidad de Piura e incluso un joven de Talara por razones de trabajo. Y que ella le preguntó si me conocían y se alegraron de recordarme, le dieron muy buenas referencias de mi persona, pero le dijeron que habían pasado muchos años que no sabían de mí Se sorprendieron que fuéramos amigos.

     Eso me hizo sentir bendecido, sentí que mi siembra tenía una cosecha, porque Dios no es deudor de nadie Mónica me preguntó, amigo cómo estás?

   Mal le dije, no puedo caminar, le conté mi problema de salud, y lo difícil que era encontrarle una solución a través de EsSalud en Lima. Le conté lo difícil que es recibir atención médica y oportuna en el Sistema de Salud Pública Peruana y del Seguro Social, Pero busca otros médicos me sugirió Mónica, no lo hago le dije por falta de dinero.

    Al otro día Mónica me escribió que había hablado con su esposo Frank y que habían decidido enviarme una ofrenda para que vea otros médicos y digan que se podría hacer para encontrar una solución,  Incluso poder sacarme una resonancia de forma particular, lo cual hice apenas pude.

     El médico que vimos nos dijo que no existía otra solución que volver a operar ¿Entonces doctor cuándo me opera? Le dije: 

    El neurocirujano nos dijo que hasta febrero estaría desocupado para operarme, ya se imaginan cómo me sentía y era 4 de octubre, víspera de mi cumpleaños.

     Ese Doctor dijo que por ética debía operarte quien lo hizo la primera vez. Doctor, le dije, la doctora que me operó el año pasado, nadie la ubica, se fue del Hospital donde trabajaba me dicen, no consigo ni su teléfono. 

    Me dijo yo la conozco y mañana estará de 8 a 9am en el piso 13 de Neurocirugía del Hospital Rebagliati, ella ha regresado a trabajar allí; búsquela y dígale que yo lo envío. 

    Amigos, no se imaginan como se llenó de esperanza mi corazón, sentíamos que Dios ayudaba, no nos dejaba desamparados como decía esa canción. 

     Al otro día, 5 de Octubre fue mi cumpleaños N°62, había una mezcla de sentimientos en mi persona y tarde esa noche, averigüé como es la oración que Dios responde 

     Amigos, Ojo que podemos pasarnos la vida entera orando y no recibir nada muchos de nosotros queremos ver nuestras oraciones respondidas por Dios, Queremos que la respuesta de Dios llegué y que actúe de acuerdo a lo que estamos pidiendo. 

    Está de más decir que la Biblia está llena de promesas, de que Dios responde nuestras oraciones también comprendí que Dios no responde toda oración ni le responde a todo el mundo, muchas veces oramos y no recibimos y la pregunta es porque pasa esto?

     Yo creo que la respuesta está en la misma Biblia, que dice “Y esta es la confianza que tenemos en él que si pedimos alguna cosa conforme a su voluntad, él nos oye. Y si sabemos que él nos oye en cualquiera cosa que pidamos, sabemos que tenemos las peticiones que le hayamos hecho” (1Juan 5:14,15)

    También es importante recordar que la Biblia nos instruye mucho por ejemplo el apóstol Santiago dice que muchas veces pedimos y no recibimos porque pedimos mal, básicamente nuestras oraciones no serán respondidas por Dios porque no coinciden con la voluntad de él, porque nosotros preparamos otros planes sin considerar a Dios.

        Esa es la gran diferencia de vivir haciendo la voluntad de Dios, y hacer nuestros propios planes sin preguntarle a Dios.

     Amanecía el día jueves 6 de octubre, en que iríamos a tratar de hablar con la Doctora que me operó una primera vez mi columna el año pasado. Recuerdo que eran las 6am y llegamos en mi auto cerca del Hospital Rebagliati, nos cuadramos en una callecita cercana a la puerta principal.

     Y le dije a mi esposa, mi amor No te bajes del auto, vamos a orar primero a Dios para que nos ayude a encontrar a la Doctora y para que la podamos convencer de que me opere otra vez mi columna.

     Amigos, amanecía en Lima y nosotros derramamos nuestro corazón en nuestra oración dentro de nuestro auto, clamamos incluso, pero siempre pensando y creyendo en la Palabra que Dios me había dado: “Otra vez oz digo, que si dos de vosotros se pusieren de acuerdo en la tierra acerca de cualquier cosa que pidieren, les será hecho por mi Padre que está en los cielos” (Mateo 18:19) 

     Finalmente le dijimos a Dios: Señor ábrenos todas las puertas para que me operen o ciérranos las puertas. Le dijimos: Ten misericordia de nosotros, porque sabemos que tu Palabra dice que cada mañana tu traes nuevas misericordias. 

    Y nos fuimos a sacar 2 tickets de autorización para subir al piso 13C del Hospital Rebagliati para buscar a la doctora. 

     Amigos, humanamente era imposible de que nos dejaran entrar. Pero El Padre y El Hijo iban delante de nosotros como poderosos gigantes, y nosotros nos sentíamos parte de ellos, había gozo, fe, esperanza y fuerza incluso, pero con mucha paz, creo que caminamos al lado de Dios, así nos sentíamos. Llegamos al piso 13C de Neurocirugía y salió una mujer seguridad que controlaba celosamente el ingreso, mi esposa Cecilia le explicó el motivo de nuestra presencia y esta señora ingresó a preguntar si podíamos entrar. A los 5 minutos estábamos conversando sobre mi caso con la doctora que me operó la primera vez (06 de agosto 2021).Ella miró mi historia médica y la resonancia magnética que habíamos llevado y me dijo señor Lavalle, este problema se resuelve operando otra vez.

      Me dijo, hoy es jueves, lo puedo operar el otro viernes o a fin de mes. Doctora, yo quiero cuanto antes porque no es vida la que llevo con este problema.

      Amigos, yo creo que milagrosamente ella tomó la decisión de operarme el viernes 14 de octubre, me llamaron el fin de semana para darme una fecha de ingreso para hospitalizarme. 

    Le agradecimos mucho y salimos casi llorando de emocionados; Dios lo había hecho, nosotros pedimos en la Oración que hicimos en mi auto que Dios abra todas las puertas o que cierre todas las puertas, y parece que nuestro Dios las abrió grandemente de par en par.

     Amigos y hermanos en Cristo : La fe hace posible lo que nos parece imposible, Amén !!!

     Regresamos a casa felices, mucha, llenos de gozo. 

         El sábado por la noche nos llamó un Doctor para indicarnos que debía estar en el Hospital el lunes a las 8 am para ser hospitalizado. Así lo hicimos, y en todo momento yo buscaba que el Espíritu Santo me llene de humildad y gratitud.

     Lunes 10 de octubre, martes y miércoles los emplearon en los exámenes pre operatorios, yo no me preocupaba, sabía en mi corazón que el viernes sería operado con éxito.

    Y llegó el viernes 14 de octubre, y oré antes de ir al quirófano, eran como las 10 am. Como recordaba ese pasaje de Isaias 55:8,9 que dice: “Porque mis pensamientos no son vuestros pensamientos, ni vuestros caminos mis caminos, dijo Jehová. Como son más altos los cielos que la tierra, así son mis caminos más altos que vuestros caminos, y mis pensamientos más que vuestros pensamientos” 

    Estaba contento y seguro en la sala de operaciones, conversaba con los Doctores, les decía que mi hipófisis se me murió hace varios años atrás, que tomaba las hormonas artificialmente, que eso me hizo diabético, alteró mi tiroides, que tenía 2 stens en mi corazón y sufría de la próstata, ah, y que tenía presión alta. 

      Pero que todo estaba bajo control de Dios. Y escuché la voz de la doctora Lady Lozano que dijo: Ya duérmanlo.

     Calculo que eran las 10am, desperté como a las 9pm, estaba feliz, porque estaba vivo. 

    Movía mis piernas y ya no dolían, me dolía la herida, pero seguía feliz y contento. Descanse sábado y domingo y el lunes me sentaron y pararon. Yo aproveché de caminar, quería probar que tal estaban mis piernas.

     Excelente trabajo hizo la Doctora Lady Lozano con su equipo.

     Llegó un doctor amigo y me dijo: ¿Ya te quieres ir? Si, le dije. Voy con Dios porque hasta aquí él me ha acompañado. Entonces te vas, llama a tu esposa para que te venga a recoger 

   Salimos del piso 13C sonriendo, agradeciendo; ya mi hijo Gabriel estaba llegando a recogernos del Hospital con su camioneta.

   Nunca olvidaré esa oración que hicimos con mi esposa en mi auto a las 6am en esa callecita muy cerca al Hospital-

    Siempre creo que Dios es rico en misericordia y cada mañana Dios tiene para nosotros nuevas misericordias. 

     Y nunca olvidaré lo que decía el apóstol Juan: “Y esta es la confianza que tenemos en él, que si pedimos alguna cosa conforme a su voluntad, él nos oye (1Juan 5:14) 

     Amigos, hermanos y hermanas Muchas gracias por escuchar esta historia de fe

    Démosle un fuerte aplauso a nuestro Señor Jesús que esta vivo y que siempre nos ayudará

      Amén?



































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