lunes, 15 de noviembre de 2021

UNA VEZ MAS DIOS CUIDA MI SALUD

Desde que Jesucristo me dio una nueva vida un 9 de Mayo del 2001 ("Por lo tanto, el que está unido a Cristo es una nueva persona. Las cosas viejas pasaron; se convirtieron en algo nuevo"  2ª Corintios 5:17 DHH) 
Siempre he tenido una vida sana porque dejé el alcohol, los 46 cigarrillos diarios y la cocaína 
No se imaginan cómo se siente uno de libre y de sano, pero sobre todo de perdonado, es verdad eso de ser verdaderamente libre cuando uno conoce la verdad escrita en la Biblia
Tenía 40 años y comencé a experimentar grandes y bonitos cambios, y los sentía en mi cuerpo, me sentía lleno de vida, a los 55 años comencé a ir al GYM diariamente una hora a bailar, reír y hacer ejercicios, y físicamente nunca me había sentido tan bien
De pronto mi esposa Cecilia enfermó y fue Hospitalizada en el Hospital Rebagliati con una desconocida infección a su rodilla, estuvo como 30 días hospitalizada
Dejé de correr de madrugada, a las 4.30 am todos los días, y comencé a visitar a mi esposa todos los días en el hospital, me encantaba ayudarla a que tome sus alimentos y ayudarla a tomar una ducha, era hermoso demostrarle cuanto la quería y creo que hasta ahora sigue intacto mi amor por ella
Llevaba cada 3 días sus descansos médicos a su trabajo (Municipalidad de San Isidro) para justificar su inasistencia porque estaba hospitalizada, y su diagnóstico era serio
Grande fue nuestra sorpresa cuando casi al 28 día recibí en mi dpto. una carta de su Jefe manifestando que ya no le iban a renovar su contrato
Cecilia había trabajado más de 20 años en la Municipalidad de San Isidro, la había visto dar mucho por esa entidad, en tiempos de Campaña de Cobranza la había recogido a las 12 de la noche desde las 8 de la mañana, la había visto muchos sábados trabajar medio día, cuando nadie lo hacía, y ahora teníamos en nuestras manos una carta que prácticamente decía que ya no la necesitaban más después de más de 20 años, y todavía ella estaba en una cama del Hospital Rebagliati a donde la llevé una mañana a las 11 am, directamente de su oficina porque me avisó que se sentía mal
Todas estas cosas que vivíamos me hacía pensar como cristiano que soy, en ese viejo pasaje bìblico que dice: "Haz a los demás lo que quieras que ellos te hagan a ti (Mateo 7:12) 
Yo también había perdido mi trabajo después de 8 años, y ahora mi esposa después de más de 20 años, me sentía preocupado y triste, el desánimo tocaba a la puerta de mi corazón
Cecilia mejoró y salió de alta del hospital, fue una gran alegría para mi, nuestros dos hijos varones y mi familia que me apoyó, pero yo no me sentía bien de salud, no le había querido contar a mi esposa para no preocuparla
Era raro que una persona que hacía tanto deporte como yo, de pronto le faltara el aire, se sintiera muy cansado y le doliera el pecho a la altura del corazón como si alguien pusiera su pie allí
Decidí ir al Hospital Rebagliati para averiguar cómo lo atendían a uno cuando necesitaba un médico, nunca había necesitado los servicios de ese gran hospital de EsSalud, en el caso de mi esposa, ingresó por Emergencia y fue hospitalizada después de estar tres días en los pasadizos de Emergencia
Me ubiqué por el área de los Consultorios de Cardiología para buscar que algún médico me atendiera, no sabía que había que tener una cita derivada de una trasferencia de tu Policlínico a donde perteneces de acuerdo a la dirección de tu DNI 
Me sentía adolorido y preocupado, estaba solo, comencé a orar allí, recordaba ese hermoso pasaje bíblico que dice"pedid, y se os dará; buscad, y hallaréis; llamad, y se os abrirá" (Juan 14:13) Yo creía que Dios me enviaría ayuda hasta que escuché una voz que dijo: Pedro Pablo, amigo, que haces aquí, tienes una cara de sentirte mal, que te sucede, era mi gran amiga la Dra. Anita Tarco (Endocrinóloga del Hospital) 
Le conté que me sentía mal y le dije mis síntomas, me dijo: hablaré con un Cardiólogo amigo para que te examine, espera aquí, tal vez te de una cita adicional, allí aprendí lo que es una cita adicional
Mi amiga salió del Consultorio del Cardiólogo y me dijo que ya no daba citas adicionales porque había dado las necesarias, le dije gracias Anita por tu ayuda, veré que hago, iré a casa a hablar con mi esposa
Estábamos saliendo de ese lugar y vino corriendo una enfermera y dijo: Doctora no se vayan el Doctor si los va atender, así que regresé a esperar que me atienda
El Cardiólogo después de examinarme, me mandó hacer unos exámenes lo más pronto posible, regresé en una semana con otra famosa cita adicional y vio mis resultados de mis análisis y me dijo: señor, Usted vive cerca?
porqué le pregunté, me dijo, vaya a traer su pijama y va a ingresar por Emergencia porque le va a dar un infarto
Le dije: Doctor, no me atenderán unas horas en Emergencia y después me enviaran a mi casa?
señor, le voy hacer un buen informe de la gravedad de su salud, ningún médico se correrá el riesgo de mandarlo a su caso en su estado
Me fui a mi casa, llamé a mis hijos, tenía miedo de no regresar a casa y volverlos a ver, les conté lo que me había dicho el médico y les dije que yo quería regresar al Hospital porque lo consideraba un Gran Hospital con buenos Profesionales y buenas personas que allí trabajaban
Ya me habían operado dos veces de mis manguitos rotadores, uno primero y al año el otro por las excelentes manos del Dr. Cesar Carreño (Traumatólogo) 
En casa antes de salir para el Hospital Rebagliati, les pedí a mi esposa e hijos cogernos de las manos, quería orar con ellos, quería encargarle mi vida a Dios totalmente rendida a El, si no volvía a casa, Dios me los cuidaría, tenía bien presente ese pasaje bíblico que dice :"Os aseguro, además, que si dos de vosotros se ponen de acuerdo en la tierra para pedir algo, se lo dará mi Padre del cielo. Porque donde dos o tres están reunidos en mi nombre, allí estoy yo en medio de ellos" (Mateo 18: 19,20) 
Oramos y le lloré a Dios que yo no podía hacer nada por recuperar mi salud, que todo dependía de El, que me abriera puertas, que me enviara ángeles con ayuda, que yo quería regresar a casa
Antes de salir del dpto., mire al interior de la refrigeradora y había muy poca comida, en mi mente le pedí a Dios que proveyera mientras estaba en el Hospital
Oramos y le lloré a Dios que yo no podía hacer nada por recuperar mi salud, que todo dependía de El, que me abriera puertas, que me enviara ángeles con ayuda, que yo quería regresar a casa
Y salimos de casa, mi hijo Gabriel conducía mi auto, también iba mi hijo Pedro Pablo y mi Ceci, rumbo a Emergencia del Hospital Rebagliati, era viernes a las 8 pm
Llegamos a Emergencia, estaba muy llena, pasamos Triaje después de esperar una media hora, ya estábamos dentro, impresionante que no había lugar para los enfermos, estaban en los pasadizos en camillas y hasta en el suelo
Pero yo sabía que mi Dios me ayudaría porque El siempre me prometía: "No temas, porque yo estoy contigo; no desmayes, porque yo soy tu Dios que te esfuerzo; siempre te ayudaré, siempre te sustentaré con la diestra de mi justicia" (Isaìas 41:10) 
Mi Ceci me consiguió una silla de ruedas y allí esperaba que me llamasen para examinarme, eran como las 9pm
A las 11 pm me vio un Doctor de guardia, leyó mi informe y me dijo, Usted se queda para ser hospitalizado, espere que lo llamen y acomoden, pero no hay lugar.
Salí en paz y con fe, me sentía en los brazos de Dios, como si El me cargase, pasó una hora y de pronto apareció una linda enfermera, de rostro angelical, me dijo: Usted es el Señor Pedro Pablo Lavalle?
 le respondí, venga me dijo, le hemos conseguido un cuarto en este lugar, me quedé impresionado del cuarto, que tal tecnología cardiocoronaria que tenía, la cama parecía nueva, lloré y le agradecí a mi Padre Dios, le dije gracias por tu fidelidad con tus siervos, porque eso es lo que me considero, y como el Apóstol Pablo siempre digo : "Pablo, apóstol (no de hombres ni por hombre, sino por Jesucristo y por Dios el Padre que lo resucitó de los muertos) (Gálatas 1:1)
Descansé toda la noche del viernes, todo el día sábado, y en la madrugada para amanecer domingo me despertaron a las 3 de la madrugada para decirme me me habían conseguido cama en el Hospital en el piso de Cardiología, y me llevaron para esa Área

Pasó el domingo tranquilo y llegó el lunes, me visito mi Pastor Francis Castañeda, almorcé y conversábamos hasta que fuimos interrumpidos por un Doctor que me dijo: Usted es el señor Lavalle?, le van hacer un Cateterismo?
No lo  le dije lo que me van hacer, pasó la visita de los médicos en la mañana y me dijeron que me harían varios exámenes para determinar que necesitaba, me preguntó: Ya almorzó, si le respondí, que pena me dijo, teníamos un paciente en sala para hacerle un Cateterismo y estaba todo el material (stent y todo lo demás) y se ha infartado, y pensamos en Usted, pero ya almorzó, te prometo que no me vomitaré en sala, pero llévame porque esto es para , déjame preguntarle al médico, regresaron por mi y me hicieron el Cateterismo, este examen arrojó que necesitaba tres bypass, y me dijeron que tenían que hacerme una operación a corazón abierto y reemplazar las tres arterias obstruidas, le dije Doctor, que otra alternativa hay?
Me dijo hacer una Angioplastia Coronaria, le dije hágalo, Dios ya me trajo hasta aquí, no me dijo, es muy peligrosa
Que le firmo le dije, vamos a probar me dijo, pero es doloroso, entonces póngame anestesia, el proceso no se cuanto duró, me dolía a morir, creo que me desmayé y desperté en un cuarto de recuperación, pero ya respiraba bien, no me dolía el pecho y me sentía contento
Llegó la visita como a las 8 am y me preguntaron cómo me sentía, le dije que muy bien, me dijeron: Usted cree que se puede terminar de recupera en su casa? Claro que  respondí, llamaré a mi esposa para que me venga a recoger
Salí de allí en una silla de ruedas tan agradecido con Dios, con los Doctores, enfermeras, técnicos y asistentes, mi Hospital Rebagliati para mi es lo Máximo
Fui recogido con mi auto  por mi hijo Gabriel y mi esposa Cecilia y llegamos a casa, mi Señor seguía mostrándome su fidelidad, por eso es JEHOVÀ JIREH dije (el Señor proveerá) ya que la Refrigeradora habìa sido llenada de alimentos por mi hermana Miryam 
Cómo no confiar en Dios, cómo no creer sus Palabras escritas en la Biblia, Yo si soy un hombre de a pie que cree ciegamente en El 
Era día martes, habían pasado 4 días y ya estaba como nuevo y en casa al lado de mi linda Familia, Yo creo que puedo decir con verdad y firmeza : 

"El gran amor del Señor nunca se acaba, y su compasión jamás se agota. Cada mañana se renuevan sus bondades; ¡muy grande es su fidelidad" ( Lamentaciones 3: 22,23 Biblia NVI)